A finales de verano, en la previa del comienzo de la liga, todo el mundo esperaba un duelo desequilibrado por el título. También se esperaba un descenso muy definido y un grupo de élite también bastante definido. Pues bien, la competición casera de nuestro país ha vuelto a sorprendernos.
En la lucha por el título se ha colado un invitado entre los dos gigantes del fútbol mundial R. Madrid y FC Barcelona, el Atlético de Madrid. Y no es que sea una posibilidad, un candidato, no... es que es el que en estos momentos encabeza la clasificación por méritos propios. Que un club con unos ingresos 400 millones de euros inferiores al de los dos gigantes los tutee dice mucho del mérito de este equipo colchonero del Cholo Simeone. Nadie esperaba un desenlace tan competido entre tres y vamos a divertirnos con él.
En la lucha por Europa ha pasado algo parecido, y es que un recién ascendido, el Villarreal de Marcelino, lleva instalado en los puestos de honor desde que comenzó la liga y no se cae. Otra sorpresa que pugna duramente con los Sevilla, Valencia, Athletic de Bilbao y Real Sociedad que nadie esperaba.
Y por abajo nos encontramos con la sorpresa negativa, el Real Betis. Colista desahuciado sorprendente desde el primer tramo liguero. Y es más sorprendente si cabe después del brillante papel desempeñado por el equipo verdiblanco en la Europa League, donde nos deparó una eliminatoria preciosa y épica con su eterno rival y que dejó a toda Europa asombrada con el duelo de máxima rivalidad sevillano. Pues bien, el Real Betis, de la mano de Gabriel Humberto Calderón, una leyenda de los ochenta del club verdiblanco, ha resucitado como el ave Fénix y promete luchar por no descender hasta el último partido, aunque su situación es tremendamente delicada.
Cabe destacar el impresionante arreón final del Rayo Vallecano, el equipo con menos medios de la división y envuelto en un concurso de acreedores. Su trayectoria en los últimos partidos ha sido tan positiva como efectiva, y de estar penúltimo casi sentenciado se ha escapado cinco puntos por encima del descenso.
Son estas cosas las que a día de hoy consiguen que la Liga española sea admirada y seguida en todo el mundo... y nosotros que nos alegramos por ello.
