La prórroga de la final del Mundial de Sudáfrica 2.010, entre España y Holanda, se convirtió en la emisión más vista de la historia de la televisión española, alcanzando una cuota de pantalla del 85,9% y 15.600.000 espectadores en la suma de las tres cadenas que retransmitieron el encuentro (Telecinco, C+ y C+ Liga). Sin embargo, la media durante el partido rozó los 14 millones de aficionados, por debajo de la audiencia media que siguió la final de la Eurocopa de Austria y Suiza en 2.008 (14.482.000).
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